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La aparición de granitos en la piel del rostro, el acné, es bastante común en la adolescencia y en otras etapas de la vida, aquí te contamos como evitarlos.

¿Por qué salen los granos?

Si bien en la pubertad y en la adolescencia es muy común la molesta presencia de granitos en la piel del rostro, hay otras etapas en la vida donde también suelen aparecer.

Es que en muchos casos la aparición de granitos está vinculada a los cambios hormonales, y en la pubertad y adolescencia es donde hay una gran eclosión de estas hormonas sexuales. Sin embargo, hay otras etapas donde pasada ya la pubertad y adolescencia, suelen aparecer los antiestéticos granitos, y si bien hay muchas causas que propicien la aparición de los granos, en la mayoría de ellos también está vinculada a la variación hormonal, principalmente de hormonas sexuales, en especial durante el periodo pre-menstrual.

Sin embargo, existen otras causas que producen la aparición de acné. El consumo de alcohol y una alimentación con exceso de grasa pueden favorecer su aparición. También, algunos cosméticos que estés usando  pueden estar ocasionando una reacción alérgica. Otra causa puede ser restos de maquillaje o transpiración que se quede retenido en el tejido de la almohada, favoreciendo la aparición de bacterias que producen acné e irritación de la piel.

Pero,  la mayoría de las veces es el estrés el causante de la aparición de granitos. Si estas nerviosa, o no duermes lo suficiente hace que las glándulas sebáceas reaccionen en exceso y se altere el mecanismo de regulación de grasa en la piel, favoreciendo la aparición de granos.

¿Cómo evitar la aparición de los granitos?

En primer lugar, no es aconsejable apretar los granos ni reventarlos porque lo más probable es que nos dejen marca en la piel.

Si ya has descartado algún problema dermatológico, lo mejor que puedes hacer es cuidar la higiene del rostro teniendo cuidado de no excederte. Lo principal es que te desmaquilles cada noche previo a dormir, por lo que deberías lavarte la cara dos veces al día, pero no más. Para la higiene del rostro lo recomendable es emplear agua y un producto sin jabón realizando así una limpieza suave que evite que la piel se irrita. Luego de la limpieza, es recomendable emplear un tónico a fin de reducir la grasa y la concentración bacteriana en la piel, además de equilibrarla.

Debes aplicarte cosméticos libres de aceites, que hidraten la piel sin aportarle grasa. Esto es importante tanto para la crema como para el maquillaje que emplees.

Luego que te hayas maquillado, evita tocarte la cara con las manos, así evitarás que las bacterias entren en contacto con la piel de tu rostro. También conviene que seas exigente con la limpieza del cabello,  ya que  el pelo contiene grasa y bacterias  que pueden obstruir aún más los poros al rozar la piel.

Otro factor importante es que debes protegerte del sol, ya que el bronceado no sólo no disimula los granitos sino que además puede favorecer la aparición de granitos.

Si sigues estas sugerencias reducirás las ocasiones en las que puedan salirte granitos, pero cuando surgen ocasiones en las que igualmente aparecen tales cuando estás expuesta a cambios hormonales o estás muy estresada, puedes probar con un algún remedio casero.   En ese sentido te sugerimos que uses limón porque limpia profundamente la piel y tonifica eliminando los granitos desde la raíz. Para ello exprime un limón y aplícalo en el rostro dejándolo actuar toda la noche, verás que excelente resultado te da.